lunes, 28 de enero de 2013

Una de las opciones que tenemos cuando no tenemos unas gambas excesivamente grandes es plancharlas. El planchado también da un gran resultado si tenemos una gamba de buen porte aunque en este caso parece menos necesario hacerlo. El sabor no se ve alterado en absoluto.Se trata de realizar la cocción con un elemento de peso encima.Hay varias fórmulas, yo aconsejo la del insigne Manuel Paredes, que utilizando el cestillo de una
freidora, las estira y les pone una plancha metálica encima durante la cocción dando este excelente resultado.

2 comentarios:

  1. Doy fe de ello, la vista es espectacular y la gamba gana mucho cuando no es demasiado grande,,,,y,,,,¡qué buenas están,,,!!!!

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  2. Estupendo su blog. Se me hace la boca agua. ¿Cuando invitará Vd. a sus compañeros de fatiga del turno de oficio, permitiéndoles degustar alguno de sus platos?. Le aseguro que no reprocharé nada de lo que tenga a bien cocinar. Saludos.

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